Ponce, Puerto Rico
“El club de los pequeños vigilantes” de la Academia Adventista Dr. Dennis Soto de Ponce, realizaron una marcha educativa con el propósito de llevar a la ciudadanía en general el mensaje bien claro que tenemos un padre amoroso, Creador de los cielos y de la tierra, y como mayordomos somos vigilantes de la naturaleza y de su creación. Con pancartas y con sus voces infantiles presentaron mensajes positivos sobre la importancia de cuidar el ambiente y el deber que tenemos todos de reciclar.
Esta marcha en defensa del ambiente se realizó el jueves primero de marzo en el Centro Comercial Plaza del Caribe de esta ciudad Ponceña. La directora de la academia, Zulma Santiago, y Yaneth Escalera Maldonado, maestra coordinadora del evento, nos presentaron un programa muy bonito donde los niños de cada grado participaron con canciones, poesías y dramas.
Nos llamó mucho la atención la presentación de una niña del primer grado que de memoria recitó las siguientes palabras: “¡Cómo amo tanto esta tierra, si es un regalo de Dios! Por eso debo cuidarla con todo mi corazón. Detente a reflexionar en lo que está sucediendo. El calor calienta el mar y el polo se está derritiendo. Cada noche en nuestra islita se escucha un canto especial, un coro de muchas vocecitas que a todos viene alegrar. No talemos nuestros árboles, no sembremos tanto cemento, la tierra se está calentando y sus criaturas desapareciendo. Si materiales reciclas, menos contaminación habrá, nuevas cosas se fabrican y la basura no te arropará. Recicla, reduce, reúsa, invierte bien los recursos ya que nuestro planeta tierra no resiste más abusos. La tierra quiere estar verde, el mar y el cielo azul, por eso cuida tu ambiente y gozaras de más salud. Los niños necesitamos tener un mundo mejor y que todos nos unamos en este compromiso de amor”.
Todos somos consientes que la falta de higiene y la suciedad en el ambiente son las causas más comunes de enfermedades infecciosas. La contaminación que emana de los medios de transporte son el principal ingrediente del calentamiento global, la depresión atmosférica y de la formación de la capa de ozono y de otros problemas del ambiente. Estos niños nos enseñan que todos somos responsables de cuidar la tierra, el agua y el aire ya que esos elementos impactarán nuestro mundo en el día del mañana.
Por amor a estos niños, no quememos basura en los patios de las casas, mantengamos limpios los alrededores y si vamos a la playa, para que nuestra isla siga siendo la Isla del encanto, que sus 365 playas se mantengan siempre limpias. Fueron todas estas palabras con luz presentadas por los niños de la academia adventista de Ponce en su marcha educativa.
Gracias a los estudiantes, su directora y superintendente.
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