Avance Educativo de la Unión Puertorriqueña de los Adventistas del 7mo Día

Avance Educativo de la Unión Puertorriqueña de los Adventistas del 7mo Día

martes, 12 de octubre de 2010

El Deporte Gana Almas


“Hacer deporte es hacer patria” dice un solemne pensamiento que se aplica también a la patria celestial.
En el programa educativo de la academia (Colegio) Adventista de la ciudad de Ponce, Puerto Rico, el deporte es muy importante.
Con el propósito de dar a conocer a esta institución educativa, y presentar una imagen positiva ante un mundo con prejuicios religiosos, el profesor de educación física, Edgardo López, estableció lo que se conoce como “La Liga Atlética de Colegios Unidos”. Esta es una entidad que fue presentada ante las escuelas públicas y privadas para intercambiar deportivamente en, voleibol, baloncesto, atletismo y Softboll. Todas las escuelas privadas aceptaron la invitación y sólo una escuela pública se unió a la propuesta presentada.
En este intercambio los estudiantes participantes llegaron a conocer la academia y les gustó tanto el ambiente y el lugar que insistieron con sus padres para que el próximo año los matriculasen en esta escuela, también privada y muy reconocida por sus normas y principios.
En cada reunión deportiva se ora y se resaltan los valores y virtudes cristianas. Nuestros estudiantes reconocen que lo importante es realzar el deporte, conocer nuevos amigos y dar un ejemplo positivo y de altura de lo significa participar sin peleas y en saludable camaradería. No como un medio de competencia para ser admirados, sino como una oportunidad de exaltar la convivencia sana y deportiva. Esto dio motivo para que dos de esos estudiantes conocieran el mensaje adventista y se unieran a la iglesia.
El apóstol nos recuerda: “Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús el autor y consumador de la fe el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios “(Hebreos 12:1-3).

Cortesia de: Dra. Miriam Hernández Oficina de Educación de la Unión Puertorriqueña y su esposo Pr Germán Cortés Educador en Salud.

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