Estudiantes Sudamericanos en el programa "Dilo al Mundo"

Porto Alegre, Brasil. Con un mensaje de esperanza miles de adventistas salieron por la calles para una campaña misionera que abarcó todo el continente sudamericano. Los líderes de la Iglesia afirmaron que el evento y la distribución de treinta millones de revistas de evangelización, enfatizando la enseñanza bíblica del sábado como día de esperanza para las familias, para la salud física, mental y para un mejor contacto con Dios, fue el mayor impacto para decirle al mundo “que Cristo viene y que viene pronto.”
La iniciativa motivó marchas por las ciudades y pueblos que impactaron a toda una comunidad. Se usaron parlantes que fueron colocados sobre camiones y automóviles.
”El mensaje del sábado para la población actual que vive frenéticamente y está llena de actividades, es importante porque transmite que es necesario detenerse y reflexionar en una vida de relación con Dios y nuestros prójimos” dijo el pastor Erten Koler, presidente de la División.

El alcalde de Porto Alegre, una ciudad del sur del Brasil, José Fortunatti, felicitó a la iglesia por enfatizar no solo la espiritualidad sino también el impacto social. “La iglesia es una fuerza práctica en la vida de la gente declaró. Y ella se responsabilizó para que todos recibieran el mensaje”.

Jóvenes estudiantes se unieron a este programa de evangelización distribuyendo la revista casa por casa hasta la última casa. Un niño de doce años ayudó a distribuir quinientos ejemplares de la revista “Día de esperanza”.

Edvan Snow, un joven no adventista se dedicó también a repartir la revista. Su primer contacto con la iglesia fue como participante del curso para dejar de fumar y de ahí en adelante se dedicó a fomentar la salud y a predicar el evangelio. La determinación de Edvan es impresionante. En vísperas de “Impacto de Esperanza” dijo: “Hablé con mi madre y me dio permiso para participar. Me gusta mucho participar en esta tarea de testificación. Creo en Dios. Sé que Jesús vendrá otra vez y quiero ir al cielo.”
Los organizadores dijeron que la campaña llamó la atención de automovilistas, transeúntes, turistas, y de los que estaban de compras, como también de los políticos que reconocieron que la Iglesia Adventista existe como un medio de testificación y servicio.